Sector Industrial: Ideal para industrias con altos consumos térmicos. En efecto, el hidrógeno verde puede reemplazar el gas natural en quemadores y generadores eléctricos sin afectar negativamente su funcionamiento, siempre que el hidrógeno no supere el 10% de la mezcla con gas natural. Por lo tanto, se garantiza una operación eficiente y sostenible.

Sector Energético: El hidrógeno verde generado puede inyectarse en la red de gas existente. De esta manera, se permite el uso de la infraestructura de gas natural como un sistema de almacenamiento flexible, que admite hasta un 5% de hidrógeno. Además, se mejora la eficiencia y flexibilidad de la red.

Sector Transporte: En áreas cercanas a plantas de hidrógeno, el autoconsumo de hidrógeno verde se presenta como una solución altamente viable para flotas vehiculares en transición hacia el hidrógeno. De este modo, se ofrece una alternativa competitiva en costos frente al diésel y la gasolina. Asimismo, se promueve una movilidad más sostenible.